Entendiendo los efectos económicos de los aranceles estadounidenses sobre el acero y el aluminio mexicanos
Bajo la administración de Donald Trump, el gobierno de Estados Unidos anunció la imposición de un arancel del 25% al acero importado y del 10% al aluminio importado, argumentando razones económicas y de seguridad nacional bajo la Sección 232 de la Ley de Expansión Comercial.
Esta medida ha generado preocupación en la industria mexicana, ya que podría afectar significativamente las exportaciones y la economía del país. Las autoridades mexicanas están evaluando posibles respuestas y estrategias para mitigar el impacto de estos aranceles en los sectores industrial y comercial.
Impacto en México y el T-MEC
- Posible renegociación anticipada del Tratado México-Estados Unidos-Canadá (T-MEC).
- Impacto en sectores clave como la automoción, la electrónica, la eléctrica y la químico-farmacéutica.
- Reducción de las exportaciones mexicanas a EUA, ya que este país es el mayor destino de los productos de acero mexicanos.
Medidas adoptadas por EE.UU.
- Eliminación de acuerdos anteriores con México, Canadá, UE, Japón, Corea del Sur y otros.
- Se refuerza la vigilancia para evitar la evasión arancelaria.
- Exigencia de certificación detallada del origen del acero y del aluminio.
- No renovación de exenciones arancelarias, que vencerán el 12 de marzo de 2025.
Principales proveedores de acero y aluminio de EE.UU.
1. Canadá (12.984 millones de dólares)
2. China (12.476 millones de dólares)
3. México ($10.450 millones de dólares)
4. Corea del Sur (5.056 millones de dólares)
5. Brasil (4.982 millones de dólares)
(Fuente: Instituto Americano del Hierro y el Acero, CNN)
La respuesta del gobierno mexicanose
El secretario de Economía, Marcelo Ebrard, anunció que se iniciarán consultas con EE.UU. para reconsiderar la medida y buscar alternativas comerciales.
En conclusión, estos aranceles podrían afectar significativamente a la industria mexicana, provocando una caída en la competitividad y posibles represalias comerciales, por lo que conforme continúen las discusiones, México podría buscar exenciones o mercados alternativos para mitigar estos efectos.